Iñigo Bregel (Santander, 1991) es el líder compositivo del grupo santanderino “Los Estanques”, junto Fernando Bolado (bajo), Andrea Conti (batería) y Germán Herrero (guitarra), todos ellos chicarrones del norte. Los tres primeros ya se habían hecho un hueco en el panorama musical cántabro con su anterior grupo, Crayolaser – junto con Juan Merodio y Jorge “Koke” Prieto – mediante el uso de una psicodelia lisérgizada no apta para oídos que buscan en la música algo inmediato, rápido y simple. Quizás por eso, su conversión hacia las melodías más próximas al pop necesitó un nuevo nombre, “Los Estanques”, y un nuevo hogar, lejos de la playa: Madrid.

Hablamos con Iñigo tras el lanzamiento de su disco “III” (2019), entre el dióxido de carbono y los turistas buscando “airbnbs” de la vibrante capital.

 

En primer lugar, felicitar a Los Estanques por el lanzamiento de vuestro nuevo álbum “III”… ¿Te ha pillado desprevenido una acogida tan buena? 

Pues la verdad es que sí; para nosotros es un disco más, en la onda que llevamos, pero las primeras impresiones de amigos y allegados nos dejaron bastante “pillados”. En principio, parecía que se nos había ido la olla, o ese era el feedback que nos llegaba… Ahora, en cambio, es otro; todo cosas buenas, no sé… Esto es la hostia.

¡Joder!” “Amor-odio” “Ahora el tiempo te sobra”…. ¿Algo detrás del giro hacia unas letras en las que pareces desahogarte, en vez de la ironía ácida a la que nos acostumbras? 

Bueno, tenemos que buscar la inspiración en nosotros mismos. No nos gustan los impostores y creemos que la mejor manera de no serlo es seguir este método. Al fin y al cabo, es a las canciones a las que les debemos todo, y cuando digo todo es todo. Son ellas las que nos acompañan desde el primer día. Por ellas estamos en Madrid, ellas tienen mucha culpa de la amistad que tenemos entre todos nosotros, y créeme que lo más difícil y la tarea que más nos atormenta ahora mismo es hacerlas justicia, tratarlas lo mejor posible.

Escuchando algunos “riffs” y “bucles aterradores”, confieso que este podría ser el disco de Los Estanques que más me ha recordado a los sonidos de Crayolaser, tu anterior banda en Santander… ¿Una vuelta a los orígenes, o conserváis la frescura de entonces? 

¡Ay! La frescura… La frescura es una cabrona, que huye de nosotros. Tratamos de atraparla. En este disco hay cosas “hiperpensadas”, pero hay otras que se las dejamos a imaginación repentina. Esto último lo hacemos para tratar de mantener esa frescura que, sin ir más lejos, tanto caracterizaba a Malcolm Scarpa entre otros. También podríamos nombrar el Trout Mask Replica (Captain Beefheart, 1969), que aunque suene a coña, es uno de los álbumes más frescos que existen.

Llama la atención la continuidad con que Los Estanques lleváis publicando discos, en un proceso compositivo que parece no conocer fin… ¿Tienes algún método para conseguir esta efectividad creadora? ¿Puedes compartirlo? 

No podemos distraernos. Si lo hacemos, entramos en cólera y no queremos que nadie nos padezca de otra manera que no sea musicalmente. Por eso “non stop”. Las noches en el local, son la clave. Muchas risas, allí todos los días son fiesta.

¿Qué tal os encontráis en Madrid? ¿Cuánto ha influido en vuestra música la mudanza? 

Muy bien, nos han tratado muy bien desde el principio, así da gusto. Lógicamente aquí nos movemos mucho, vamos a conciertos, a jams, etc… Y eso quieras o no te abre miras y te nutre. Hay mucha influencia de Madrid en este disco, de hecho “Madrid” fue uno de los títulos barajados.

¿Podremos volverte a ver dando clases en Black Ball, o tendréis un verano movido? 

Ojalá pueda currar ahí este verano. Allí se está muy muy bien, Marian es una tía 10, y tanto mis compañeros de curro como los alumnos generan un ambiente muy sano y divertido, que espero con ansia cada invierno. A parte, cualquier contacto con el mar es de agradecer.

¿Dónde has llegado a pasarlo peor, un día grande en el agua, o sobre un escenario ante un público expectante? 

Un día grande en el agua, recuerdo un Brusco… mi nariz lo recuerda mejor que yo.

¿Cómo comenzó tu relación con el surf? 

Por una ex novia… Espero que esta relación con el surf acabe mejor que la otra, uiyujujúi.

¿Os tendremos pronto en Cantabria? 

No podemos decir nada todavía…Pero ojalá que sí. Queremos tocar para nuestra peña, faltaría más.

¡Un saludo Iñigo, y muchas gracias por tu tiempo! 

A ti, siempre un placer Carlos. ¡Nos vemos en la orilla de la Fun House!

Carlos Serrano.